En el calendario celta
distinguimos ocho festividades importantes: cuatro de ellas están
relacionadas con el Sol (equinoccios y solsticios) simbolizado por el Dios y
cuatro fiestas relacionadas con la tierra y la Diosa que tienen que ver con los
trabajos agrícolas y organización social.
YULE
equivale el solsticio de invierno.
IMBOLC
se celebra alrededor de 2 de febrero.
OSTARA
se refiere a las fiestas alrededor de equinoccio de primavera.
BELTAINE
es el principio de verano, se celebra en la vispera de 1 de mayo.
ALBAN
HERUIN o solsticio de verano.
LUGNASADH
celebrado el 1 de agosto.
MABON
que es el equinoccio otoñal.
SAMHAIN
principio de invierno, vispera de 1 de noviembre.
El
calendario celta dividía el año
en dos partes, la mitad oscura comenzando en el mes de Samonios (lunación octubre-noviembre), y la mitad
clara, comenzando en el mes de Giamonios (lunación abril-mayo). Se consideraba que el
año
comenzaba con la mitad oscura, así Samonios se convertía
en el año
nuevo celta. Todos los meses comenzaban con la luna llena y la celebración
del año
nuevo tomaba lugar durante las «tres
noches de Samonios», la luna llena más
cercana entre el equinoccio de otoño y el solsticio de invierno. Las
lunas llenas marcaban el punto medio de cada mitad del año
durante las cuales se celebraban festivales.
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