AUTOGESTIÓN DE LA SALUD FEMENINA

Según algunas teorías de la antropología social la salud grupal e individual en su mayor parte es el legado ancestral de las mujeres, portadoras de esa sabiduría. Las mujeres fueron las primeras que se ocuparon de la salud de las demás personas, las primeras farmacólogas con sus cultivos de hierbas medicinales, parteras, mujeres sabias conocedoras de la naturaleza y de la naturaleza humana.
Durante siglos las mujeres han sido “médicas sin título”, excluidas de los libros y la ciencia oficial, aprendiendo unas de otras realizando una práctica científica empírica. Desafortunadamente estos saberes se han ido perdiendo y probablemente muchas de estas mujeres sabias, conocedoras de plantas y remedios, fueron quemadas como brujas. En la actualidad el conocimiento de la salud se halla mayormente en hombres, como sucede aún en la mayoría de las ciencias, predominantemente masculina. Se considera, por ello, una opción positiva generadora de empoderamiento el desarrollo de conocimientos, herramientas y habilidades para recuperar las estructuras de conocimiento sobre los saberes fundamentales de salud y bienestar, generando independencia y seguridad en las mujeres a través de sus cuerpos.

Antes de nada, vamos a definir los conceptos: AUTOGESTIÓN y SALUD.
En cuanto a la SALUD, la definición es bastante compleja, dado que depende mucho del punto de vista de cada persona. Es común que la gente defina la salud como la ausencia de la enfermedad: como si en ella estuviera arraigada la idea de una vivencia fugaz dentro de una secuancia continua de padecimientos, o bien que su percepción fuese resabio de experiencias de épocas préteritas. El concepto actual de la salud va más allá: “el completo estado de bienestar físico, mental y social, no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia”, según la definición presentada por la Organización Mundial de la Salud en su constitución aprobada en 1948.

El origen del concepto AUTOGESTIÓN se puede encontrar en el mundo de la administración de empresas, y en la actualidad ha pasado a usarse en los campos de la educación y la psicología. Es un concepto altamente utilizado en los movimientos sociales. La autogestión pretende el empoderamiento de los individuos para que cumplan objetivos por sí mismos. Incluye varios aspectos de la organización, como la preparación personal para asumir competencias. En el ámbito de la organización, la autogestión o administración autónoma, es el uso de cualquier método, habilidad y estrategia a través de las cuales los partícipes de una actividad pueden guiar el logro de sus objetivos con autonomía en el manejo de los recursos. Se realiza por medio del establecimiento de metas, planificación, programación, seguimiento de tareas, autoevaluación, autointervención y autodesarrollo.

Una de las deficiniciones del COACHING PARA SALUD Y BIENESTAR es ayudar a los pacientes a ganar conocimientos, habilidades, herramientas y confianza para volverse participoantes activos de su cuidado, a fin de que puedan alcanzar sus metas de salud y bienestar, identificadas por ellos mismos.

Se trata entonces tomar las riendas de nuestra propias vidas en cuanto a la salud, aceptar la responsabilidad por nuestro bienestar físico, emocional y mental en vez de atribuir esta responsabilidad a otras personas (por ejemplo médicos). No significa no acudir al médico si tenemos algún problema de salud. Por supuesto que en el caso de lesiones o enfermedades tenemos que buscar ayuda profesional. Sino más bien, se trata de enfocarnos en la prevención, para que no lleguemos a enfermar (y esa parte sí es nuestra responsabilidad) o bien darnos cuenta de los hábitos que tenemos y que nos pueden llevar a enfermar. Por ejemplo: un fumador que desarrolla cáncer de pulmón es el responsable de desarrollar esta enfermedad, no puede culpar a los demás y tampoco esperar que los médicos quiten como con una varita mágica algo que él fomenta a diario con sus malos hábitos.
Existen muchas terapias complementarias o alternativas, o simplemente buenos hábitos/higiene que podemos incorporar en nuestras vidas para MANTENER un estado óptimo de salud física, emocional y mental, sin olvidarnos de las dimensiones social y espiritual.
A nivel físico es fundamental una buena higiene, alimentación equilibrada, descanso de calidad, movimiento físico adecuado, contacto con la naturaleza (exponerse a los elementos agua, tierra, aire y sol) , pero también masajes, tratamientos de belleza para mejorar la autoestima, bailar, reír, abrazar a otras personas. Usar remedios naturales a base de plantas medicinales, aceites esenciales, etc.
Para un buen estado emocional es aconsejable cultivar amistades, pasar tiempo de calidad con nuestra familia, tener proyectos para mantenernos motivadas, aprender a gestionar las emociones de una manera sana, tener mascotas, enfocarse en lo positivo , crear belleza, orden y harmonía en nuestro entorno, ayudar a otras personas.
En lo mental te puedo recomendar regularmente hacer relajaciones, visualizaciones, meditar e incluso tener consultas regulares con una pscicóloga para una buena higiene mental. Elegir deliberadamente donde ponemos nuestra atención: con que nos estamos nutriendo (no sólo en lo físico)- que leemos, vemos, escuchamos, con que personas nos rodeamos?
El aspecto social es muy importante también: pasar tiempo de calidad con otras personas, tener mascota, cultivar las amistades, sentirse parte de una comunidad, ayudar o sentirse útil va a aumentar nuestro bienestar.
En cuanto a nivel espiritual, las personas que tienen fe y creen en algo más grande, pertenecen a una comunidad, sienten que aportan valor al mundo a través de su labor, suelen ser más felices. Compartir, ayudar y pertenecer nos aporta mayor bienestar.

Hasta ahora hemos hablado de técnicas y consejos de los cuáles se pueden beneficiar todas las personas. En cuanto a las mujeres, la salud femenina tiene sus cosas específicas.
Los problemas hormonales se pueden tratar con plantas medicinales (matricaria, Hierba Luisa, Onagra, etc.), se pueden hacer ejercicios específicos para el suelo pélvico, reunirse en Círculos de mujeres para hablar y compartir, hacer Ritos de útero, practicar menstruación consciente (y no contaminante al eliminar el uso de tampones y compresas y reemplazlas por ejemplo con la copa y/o bragas menstruales), conectar con las ancestras para hacer sanaciones de la línea materna, practicar yoga prenatal y postnatal, dar luz de una manera natural, cuidar a los recién nacidos sin tanta química...hay muchas cosas que se pueden hacer como prevención de dolencias graves.

Será por inclinación natural, será por constructos socio-culturales, a las mujeres se les atribuyó el rol de cuidadoras. Cuidar los hijos e hijas, cuidar a las personas mayores, cuidar la comunidad, siempre preocupadas por los demás....y se nos olvida cuidarnos a nosotras mismas. Y es que si no estás bien, si no te cuidas a tí misma, tampoco podrás luego atender bien a otras personas. Así que, cuidate compañera!